La sostenibilidad de cualquier
proyecto o emprendimiento comienza con una gestión profesional de sus
costos. Estos son presentados en un presupuesto que nos indica, en términos
monetarios, cuál es la inversión inicial
necesaria de recursos que tendrá que hacer una organización o emprendedor
para crear determinado producto o servicio.
El PMBOK®, en su sexta edición, nos indica
cuales son los 4 procesos que podemos
tener en cuenta, como buena práctica, para gestionar los costos de cualquier
proyecto:
1.- La planificación de
la gestión de los costos: este proceso consiste en definir y documentar, en un plan de gestión de los costos, cómo se planificarán,
estructurarán, estimarán, presupuestarán y controlarán los costos que debemos
asumir para realizar el proyecto. En este plan deben estar definidos por
ejemplo: el nivel de exactitud que se espera de la estimación, las unidades de
medidas que se utilizarán, qué desviaciones estamos dispuestos a aceptar como
normales, y cuáles no, con respecto a la línea base o presupuesto, cómo vamos a
medir y hacer seguimiento a la ejecución presupuestaria y qué medio
utilizaremos para documentar y comunicar todo lo referido a la gestión de
costos, entre otros elementos.
2.- La estimación de
los costos: como su
nombre lo indica, este proceso consiste en estimar los costos de todos los
recursos, mano de obra, equipos, maquinarias, instalaciones, servicios, etc.,
que serán necesarios para que el proyecto genere el producto o servicio
planificado, tomando en cuenta además la inflación y las contingencias.
La estimación de los costos es un ejercicio que se va
refinando a la lo largo del proyecto y en la medida en que contamos con mayor
cantidad de información estas estimaciones se hacen más exactas.
3.- La determinación
del presupuesto: este
proceso consiste en agregar los costos estimados de cada una de las actividades
o paquetes de trabajo del proyecto. Esta información, al ser combinada con el
cronograma del proyecto, se representa en la línea base de costos, que nos va
indicando la cantidad de recursos disponibles para el desarrollo de la
iniciativa a lo largo del tiempo.
4.- El control de los
costos: finalmente
controlar los costos consiste en monitorear los costos del proyecto para
detectar desviaciones en la línea base de estos. De esta manera vamos haciendo
un seguimiento a los fondos invertidos.
Para controlar el tiempo y el costo del proyecto podemos
utilizar la técnica de la gestión del valor ganado, en este enlace conseguirán
información al respecto.
Aplicar las mejores prácticas en el manejo de los costos del
proyecto nos permite no afectar, al
menos por la vía de la inversión inicial, los índices de rentabilidad ni el
período de recuperación estimado para los fondos invertidos. El sobre costo, producto de una estimación deficiente en
los precios, un cambio en el alcance o un retraso en el cronograma, podrían
en un caso extremo diluir la rentabilidad del proyecto considerado inicialmente
factible.
Por otra parte, obtener un ahorro en el presupuesto, producto de una estimación inexacta,
implica que hemos asumido un costo al perder la oportunidad de asignar recursos,
que comprometimos en el proyecto mal estimado, en iniciativas alternativas que
posiblemente hubiesen generado alguna ganancia para la organización o el
emprendedor.
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Buena info. para los que estan interesados en el área de presupuestos de proyectos.
ResponderEliminarMuchas gracias por la lectura y el comentario, saludos!
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