¿Cuál es la mejor metodología para gestionar proyectos?

 



Hace unas semanas me encontré con esta pregunta en un story de Instagram, iba acompañada de 4 opciones: cascada, scrum, ágil o híbrido. Aunque creo que esta no es una duda común entre los profesionales con experiencia y certificaciones en gestión de proyectos, pareciera sí serlo entre quienes se inician o no están relacionados con las diferentes comunidades de la profesión y como sé que hay muchos de los lectores del blog que pertenecen a este segundo grupo quise darle respuesta a esta interrogante.

En principio la pregunta no está bien formulada, no existe un marco de trabajo o metodología superior, o mejor que otra, para gestionar proyectos, sin embargo, pareciera que el mercadeo que se ha hecho de la agilidad ha cosechado sus frutos en detrimento de los enfoques predictivos. Y en este punto, tal vez valga la pena que quienes pertenecemos a las comunidades profesionales de gestión de proyectos hagamos una autocrítica, ya que muchas veces promovemos esta idea de predictivo vs. adaptativo, hacemos memes burlándonos de uno u otro enfoque e incluso descalificamos a quienes están en el “bando” ¿contrario?

Pienso que lo importante es entender que ningún marco de trabajo es perfecto y por ende no existen garantías, usando uno u otro, de alcanzar los objetivos y resultados esperados. Ahora bien, y como diría cualquier economista, la respuesta a la pregunta que titula el post es depende. Y aquí entran en juego diferentes factores ¿Qué problema o necesidad vamos a resolver? ¿Qué tipo de proyecto vamos a gestionar? ¿Si vamos a construir un edificio, desarrollar una app, crear un programa de formación o escribir un libro? ¿Existe suficiente información o tenemos un alto grado de incertidumbre sobre el producto, servicio o resultado que se creará? ¿Nuestra organización opera en un entorno complejo o complicado? ¿Para los interesados es importante que se controlen los cambios o están abiertos a estos? ¿Ya existen buenas prácticas y no tenemos que inventar la rueda o por el contrario tenemos espacio para la experimentación?......estás son apenas algunas de las preguntas que podríamos estar haciéndonos para determinar cuál será el enfoque de gestión adecuado para nuestro proyecto y si su ciclo de vida se adapta mejor, y nos permite obtener los resultados que esperamos, a la predictibilidad, la adaptabilidad o a la combinación entre ambas.

Ningún marco de trabajo o metodología es mejor que otra, pero, sí existe una que se adapta mejor al proyecto que estamos por gestionar.

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4 comentarios:

  1. Saludos Alejandro
    Tienes razón en que hemos mercadeado mucho la agilidad como la salvadora de todo y realmente sabemos que no es así, es más yo me atrevo a decir que no existe una metodología real que coadyuve al cumplimiento de los objetivos, todo dependerá de la naturaleza del proyecto, y esas preguntas generadoras son atinentes a la hora de escoger bajo cuál enfoque desarrollar un proyecto.

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    1. Gracias por comentar Alexis, en efecto en la gestión de proyectos, como en la mayoría de las profesiones, no existen "balas de plata" o soluciones perfectas, vivimos en un mundo que no obedece a la representación lineal que nos empeñamos en utilizar para nuestra tranquilidad. Saludos!

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