Hace un par de días, una de las pasantes que forma parte de mi
equipo me comentó lo útil que ha sido para ella aprender de gestión de
proyectos durante nuestras sesiones de trabajo: “me ha servido para afrontar con éxito mi último curso académico,
relacionado con este tema, necesario para obtener mi grado universitario”. Adicionalmente
esta chica cuyo nombre es Gabriela ahora está interesada en seguir estudios de
post grado y aprender más sobre la gestión profesional de proyectos.
De igual manera otra de las integrantes del equipo, Cemir, me
consultó hace poco mi opinión acerca de varios diplomados de gestión de
proyectos que se dictan en universidades de la ciudad de Caracas, interesada
también en adquirir más conocimiento y herramientas que mejoren su desempeño
profesional.
Estas dos manifestaciones de interés por aprender sobre cómo
gestionar mejor nuestros proyectos me llenó de mucha satisfacción, ya que
durante mi trabajo como consultor no solo he tratado de convencer a los demás
miembros de la organización, de la importancia que tiene utilizar herramientas profesionales
en la gerencia de cada una de las iniciativas emprendidas, sino que además he
tratado de trasmitirles la pasión que siento por todo lo que está relacionado
con los proyectos y creo que al menos he logrado sembrar la semilla de la
curiosidad.
Estoy convencido que parte de nuestro trabajo como
profesionales en la gestión de proyectos, independientemente del rol que desempeñemos,
es convertirnos en activistas que contagiemos al resto de la organización con
el interés de aplicar las mejores prácticas y obtener los mejores resultados
posibles.
En lo particular dentro de las sesiones de trabajo que hemos
desarrollado tanto con la conceptualización e implementación de la PMO y el
programa Opción Emprender, he incluido talleres en los que trato de motivar al
resto de la organización a ahondar en la gestión profesional de proyectos, entendiendo
la necesidad de esta para alcanzar nuestra visión organizacional compartida.
Aunque en muchos casos es complicado vencer la resistencia al
cambio, es importante que no nos dejemos vencer en nuestro afán evangelizador.
Mostrar compromiso con lo que hacemos, motivar, invitar a transitar caminos
mucho más eficientes y efectivos y que los miembros de la organización puedan
evidenciar los resultados, comparándolos con el pasado, creo que es la mezcla
necesaria para atraer voluntades hacia la gestión profesional de proyectos o
simplemente hacia una mejor manera de hacer las cosas.
¿Y ustedes cómo se consideran, profesionales o activistas de
la gestión de proyectos?